5 consejos para lavar a pacientes encamados

El aseo es un hábito diario importante para cualquier persona y más cuando se trata del aseo de personas encamadas o postradas.

No solo se les ayuda a mantener la higiene corporal y de la zona de descanso o de habitabilidad, sino que contribuye también a aumentar su calidad de vida y a cuidar de su salud.

El aseo de una persona encamada es completamente distinto al de otra persona que pueda mantenerse erguida o que presente fuerza en su tronco y que solo necesite cierta ayuda.

Sigue estas pautas para lavar a una persona encamada y disfrute de un baño reconfortante

como lavar a una persona mayor

1 – Realiza la tarea con tranquilidad y calma

El momento del baño ha de ser calmado y relajado, intentando proporcionar al usuario una experiencia positiva en todo momento.

Evita prisas y convierte ese instante en una buena experiencia. Los movimientos para cambiar de posición a la persona deben ser lentos y cuidadosos.

Si el paciente necesita algún tipo de instrumento externo permanente para su cuidado, deberemos prestar especial atención al llevar a cabo las movilizaciones.

2 – Prepara un ambiente agradable y cómodo

Procura en todo momento el bienestar de la persona. Es importante para ello que la temperatura tanto del agua como del ambiente sean adecuadas.

Por otra parte, al lavar a una persona mayor encamada también la temperatura de las manos debe ser agradable si vamos a acomodar al usuario o a ayudarle a realizar determinados movimientos.

Tener cerca todos los instrumentos y productos que vayamos a necesitar puede hacer que la tarea sea mucho más cómoda para ambas personas, evitando así imprevistos y demoras.

3 – Aprovecha el momento del aseo para beneficiar la salud del paciente

El baño es un buen momento para revisar la piel del usuario, podemos prevenir y evitar escaras o heridas por el roce de las prendas.

También podemos prevenir infecciones en heridas ya existentes, manteniendo un control y cuidado constantes.

La estimulación sanguínea es uno de los beneficios que aporta el aseo diario. Las personas que permanecen mucho tiempo en la cama a menudo padecen de la circulación por la escasez de movimientos.

Sin embargo, durante el baño se puede beneficiar enormemente su salud mediante masajes y movimiento de las extremidades.

4 – Sigue los pasos del aseo recomendados

Existe una serie de pautas recomendadas para que el baño sea óptimo y eficiente.

Hay que tener en cuenta que habremos de ir secando por presión, nunca por arrastre, cada zona que vamos aseando y aclarando. El orden a seguir es el siguiente:

  • Comienza por la cara, el cuello y las orejas sin jabón. También es momento para el aseo bucal si se decide realizarlo.
  • A continuación, se asearán los brazos completos y las manos minuciosamente. Este es el momento adecuando para cortar las uñas de forma redondeada.
  • El torso y el abdomen serán las siguientes partes a limpiar según este orden.
  • Piernas completas y pies, para lo que será necesario flexionarlas (siempre que sea posible) para poder acceder a la parte trasera. Es el paso adecuado para cortar las uñas de los pies.
  • Volteamos hacia un lado al usuario y procedemos a la limpieza de la espalda y la zona trasera. Podremos aprovechar aquí para revisar la piel de esta zona y propiciar un masaje circulatorio.
  • Por último, atenderemos a la higiene de los genitales mientras el paciente permanece en la misma posición.

Para finalizar, deberemos secar muy bien la humedad que haya podido quedar y aplicar las cremas o realizar las curas necesarias.

El cabello puede ser el primer o el último paso del baño. Si te preguntas cómo lavar la cabeza a una persona encamada, te aconsejamos que hagas uso de bandejas lava cabezas para facilitar la tarea.

5 – Higieniza también la zona donde se halle el paciente

Tras haber seguido los pasos para lavar a una persona encamada, será de vital importancia limpiar e higienizar la estancia y la zona donde el usuario se encuentre la mayor parte del tiempo.

La cama, la silla o el sillón; la habitación y la ropa que el paciente vista deberán quedar limpias para aportar el máximo confort a la persona.

La autoestima, la confianza, la felicidad y su calidad de vida tras el aseo se verán incrementadas visiblemente.

Mejores productos recomendados para lavar a una persona encamada

A continuación, te recomendamos una serie de productos que harán del aseo una tarea mucho más fácil, sencilla y cómoda.

¿De qué trata?
Empapadores: se trata de una herramienta muy útil para proteger el colchón y las sábanas de la cama de la humedad mientras lavamos al usuario. Sirven también para colocar sobre el suelo; mantiene la limpieza y evita posibles accidentes
Toallitas: sin necesidad de aclarado sirven para limpiar manos, cara, cuello, etc. No contienen alcohol y son muy versátiles y prácticas
Gel sin aclarado: este producto no requiere de aclarado alguno, es simple de usar y proporciona limpieza, frescor, y suavidad. Es hipoalergénico, ideal para pieles sensibles y delicadas
Jube: se trata de una palca de base rígida y plana con laterales que garantiza que el agua se estanque y caiga al depósito con ruedas. Viene equipada con una ducha de mano con manguera de 11 metros y una colchoneta para la cabeza
Patas de elefante: conteras para elevar la cama en este caso y que facilitan enormemente el momento del aseo diario. Comprende distintas alturas. Previene malas posturas para el cuidador

Puedes contar con nosotros para consultar cualquier duda sobre como asear a una persona mayor encamada. También puedes visitar nuestra web para encontrar muchos más productos útiles para esta actividad.

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